El 29 de septiembre se celebró el Día Mundial del Corazón, y en nuestra farmacia apoyamos esta fecha con una charla impartida por la cardióloga Emilia Tormo, de la Fundación Valenciana Vicente Tormo Alfonso, entidad que colabora activamente con la Fundación Española del Corazón.

Aprovechando este evento, este año hemos incorporado en la farmacia nuestro servicio de Análisis del Riesgo Cardiovascular (RCV) y nuestro servicio de prevención del ictus mediante la detección de una posible fibrilación auricular (la arritmia más frecuente en la práctica clínica).

¿Conoces la Tabla Score? Te resultaría interesante si tu prioridad es tu salud cardiovascular.

El RCV indica las posibilidades que tienes de sufrir alguna enfermedad cardíaca según tus antecedentes y hábitos de vida.

Existen aspectos que podrían mejorar este RCV y en los que quizá no solemos pensar:

  • Tener una actitud positiva ante la vida
  • Aumentar nuestras defensas
  • Protegernos frente a la polución

Estos factores quizá no sean los más importantes, pero sí pueden contribuir positivamente a la reducción del RCV. A lo largo de este artículo te hablaremos de los estilos de vida que más influyen en la mejora de tu salud cardiovascular.

Importancia de la inflamación

Cuando nuestro organismo detecta un “extraño”, se pone en marcha nuestro sistema de defensas o sistema inmunitario (SI),

El SI es una red compleja de células, tejidos y órganos que funcionan en equipo para defendernos de los cuerpos extraños: los reconoce, los controla y se deshace de ellos.

La inflamación es el resultado de la lucha de nuestras defensas contra el cuerpo extraño. Su objetivo es aislar y destruir lo dañino y reparar el tejido u órgano afectado.

En realidad, la respuesta inflamatoria está en la base de muchas enfermedades. Cuando el proceso se prolonga en el tiempo, aparece la inflamación crónica, muy relacionada con el estilo de vida.

Una hipertensión mal controlada, la diabetes mellitus tipo II o la obesidad inciden negativamente en el corazón y favorecen un estado de inflamación crónica.

Un proceso inflamatorio crónico en la pared arterial genera una placa de ateroma. La aterosclerosis es un proceso fisiológico generalizado de deterioro de las arterias relacionado con la edad (se endurecen las arterias)., que implica acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias dentro y sobre las paredes de las arterias.

Cuando hablamos de enfermedad cardiovascular (CV), nos referimos a un amplio abanico de problemas de corazón y vasos sanguíneos:

  • Enfermedad coronaria (angina de pecho e infarto de miocardio)
  • Ictus cerebral (hemorrágico e isquémico)
  • Claudicación intermitente

Y si miramos las defunciones según la causa de muerte, las enfermedades del sistema circulatorio ocupan el primer lugar. La buena noticia es que más del 80 % de la enfermedad cardiovascular se puede prevenir con un cambio a hábitos de vida saludables.

Factores de riesgo cardiovascular

Pero, ¿qué factores de riesgo deberíamos analizar para mejorar nuestra salud cardiovascular?
Dentro de los FRCV (factores de riesgo cardiovascular) podemos diferenciar entre los no modificables donde poco podríamos hacer, y los modificables, que es donde podríamos actuar.

FRCV No modificable

  • Sexo: los hombres tienen mayor riesgo de enfermedad coronaria, aunque este riesgo se iguala en la mujer tras la menopausia
  • Herencia familiar
  • Edad
  • Antecedentes personales de enfermedad cardiovascular
  • Raza

FRCV Modificables:

  • Dislipemia (colesterol y/o triglicéridos altos)
  • Hipertensión arterial
  • Tabaquismo
  • Sedentarismo
  • Obesidad
  • Diabetes mellitus tipo II
  • Estrés
  • Consumo de alcohol

La mejor prevención son los estilos de vida:

  1. Nutrición saludable
  2. Ejercicio: al menos 30 minutos moderados, 5 días a la semana
  3. Control del estrés y manejo de emociones
  4. Dormir entre 7 y 8 horas diarias

En resumen, un estilo de vida inadecuado favorece un estado de inflamación crónica. Esta está considerada uno de los mecanismos centrales en el desarrollo de muchas enfermedades cardiovasculares, ya que facilita la aterosclerosis, el daño en el revestimiento de los vasos (menos flexibles, con riesgo de hipertensión y coágulos) y puede derivar en enfermedades específicas como la cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca o arritmias.

La inflamación, por tanto, es un factor de riesgo tan importante como el colesterol, la hipertensión o la diabetes.

En Farmacia Parque de la Salud, uno de nuestros farmacéuticos puede realizarte el seguimiento necesario para que tu salud cardiovascular sea la óptima. Confía en nosotros: te atendemos con la ilusión del primer día y con la experiencia de más de 25 años.

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